Nuestro país registró por séptima semana consecutiva una baja de los contagios de COVID-19 respecto al pico máximo alcanzado en la segunda semana de enero, donde hubo más de 800.000 infectados. También en cuanto a los decesos se registró la sexta semana consecutiva de merma, cayendo la mortalidad un 54 por ciento, con relación a la semana anterior. En estos momentos, la ocupación de camas de terapia intensiva se ubica en un 39,5 por ciento a nivel nacional.
Para confirmar la necesidad de la vacunación a quienes no cuentan con su esquema completo, las personas fallecidas que no se habían vacunado son 6,3 cada 100.000 habitantes, los que solo tenían una vacuna la cifra es de 1,6 y quienes sí tenían completo su esquema el número se reduce a 0,7 cada 100.000 habitantes, unas 9 veces menos que los que no se vacunaron.