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Desde el Ministerio de Salud de la Nación se realiza una campaña para aplicar una dosis adicional de la vacuna triple viral y la polio.

por JULIO ALBORNOZ

En nuestra ciudad, el ejecutivo adhirió a la medida por lo que la vacunación se hará a través de los hospitales y vacunatorios dependientes del Gobierno de la Ciudad. La campaña comenzó el 1 de octubre y se extenderá hasta el 13 de noviembre de este año, apuntad a los menores de entre 13 meses a 4 años inclusive.

Los niños y niñas de entre 13 meses a 4 años, recibirán una dosis extra de las vacunas triple viral (que previene el sarampión, la rubéola y las paperas) y de la polio, como refuerzo de las dosis que pudiesen haber recibido anteriormente. No se debe contar una orden médica previa, y los vecinos de la Ciudad deberán sacar un turno para elegir la posta a dónde irán luego a vacunarse.

La medida fue impulsada por el Ministerio de Salud de la Nación, ante la posibilidad de la reintroducción de estas enfermedades, que habían sido eliminadas o si bien están controladas pero se mantienen fuera del estado endémico mediante el control y la vacunación.

En la Ciudad de Buenos Aires, la campaña se realizará en los distintos centros de salud públicos. Al momento de asistir al vacunatorio se deberá llevar el carnet de vacunación junto al DNI, además de estar acompañado por una persona mayor a 18 años.

Las dosis que se aplicarán son gratuitas, obligatorias y pueden administrarse en forma conjunta con la vacuna contra la COVID-19 y con cualquier otra vacuna del Calendario Nacional.

En el caso particular de la vacuna contra la varicela, también puede ser aplicada en el mismo momento que las del resto de esta campaña -sarampión, rubéola, paperas y poliomielitis-. Caso contrario, se deberá esperar un mes para su aplicación.

 

¿Por qué es tan importante la vacuna triple viral?

 

La triple viral es una vacuna obligatoria, que se halla dentro del Calendario Nacional de Vacunación (VER ESQUEMA), y que debe aplicarse a los 12 meses de edad y al ingreso escolar con 5 años. Protege a los niños (y a futuro) contra los virus de sarampión, rubeola y parotiditis. Quienes hayan nacido antes de 1965 no necesitan vacunarse ya que son consideradas inmunes.

El sarampión es una enfermedad viral sumamente contagiosa y que potencialmente puede ser de gravedad, la cual se propaga con facilidad cuando la persona infectada elimina secreciones respiratorias al hablar, toser o estornudar. Puede aparecer a cualquier edad, aunque las niñas y los niños son quienes tienen mayor riesgo de presentar un cuadro de mayor gravedad.

Sus síntomas son los siguientes: fiebre (en muchos casos alta), la que puede ser acompañada de conjuntivitis, secreciones nasales, tos y aparición de manchas que comenzando en la cabeza, se van extendiendo por el cuello, el tórax y los pies.

 

“No se requiere una orden médica previa, y los vecinos de la Ciudad de Buenos Aires deberán sacar turno de manera online”

De igual manera, la rubéola también es una enfermedad viral, y también puede presentarse en adultos y niños.

En el caso de las embarazadas que son sensibles al contacto con el virus, de contagiarse puede llegar a producirse la muerte del feto, o incluso (de estar en fecha para el parto) del neonato. De igual manera, el recién nacido puede tener el llamado Síndrome de Rubeola congénita (SRC), que produce graves malformaciones en este, las cuáles son causa de sordera, ceguera y cardiopatías congénitas. Sus síntomas son fiebre y erupción en la piel.

El otro virus que se busca prevenir con esta campaña de vacunación es el que produce las paperas, otra afección viral, caracterizada por la inflamación de las glándulas salivales, y que puede llegar a producir complicaciones como inflamación testicular (orquitis), pancreatitis, encefalitis, y otras en menor medida.

Sus principales síntomas son: fiebre, inflamación de las glándulas parótidas (son dos glándulas: una en cada mejilla, la primera sobre la mandíbula, y la otra en frente de las orejas) y otras glándulas.

¿Cómo es la situación sanitaria en todo el país?

 

Argentina se encuentra libre de poliovirus desde el año 1984 y no se ha informado de casos endémicos de sarampión por más de 20 años (la última endemia fue en el bienio 1999/2000). En cuanto a la rubéola y el síndrome de rubéola congénita (SRC), la última vez que existió un caso endémico fue en 2009. A pesar de todo esto, la posibilidad de que puedan volver a introducirse estas enfermedades es una realidad, pues los tres virus citados siguen circulando en otros países de la región.

Es más, el 2 de julio de este año se confirmó un caso de sarampión en nuestro país. Se trataba de una pequeña de 2 años, del partido de Vicente López, que había estado en contacto con un pariente que llegó al país luego de realizar un viaje por Europa y África. De inmediato se aplicaron los protocolos para aislarla, y debido a estas acciones de control y seguimiento de todos sus contactos, no se presentaron más casos de la enfermedad. Esto marca la pauta del estado de permanente atención en lo que a estos virus se refiere. Y la vacunación es quizá el más importante de todos para prevenirla

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