Trabajos privados ya muestran una regresión muy fuerte en algunos sectores. Cuáles son las luces de alerta que se encienden y la visión a futuro.
La industria comienza a activar algunas alarmas porque los números macro siguen sin dar signo positivo. Más allá de la baja de la inflación -una variable no menor -, lo cierto es que hay algunos síntomas con los que los empresarios ya no están cómodos.
La UIA, a través de su Centro de Estudios dio a conocer un informe en el que muestra los problemas que comienzan a aparecer.
Según el trabajo realizado, los datos de marzo en cuanto al movimiento de la industria “reflejan una mayor caída por parte de la industria”. De acuerdo con cálculos preliminares de la entidad, en marzo se comenzó a ver una pronunciación de la caída de la actividad. “Hubo una baja mensual de magnitud y se estima que se aceleró la contracción interanual”, sostiene la UIA.
La actividad económica anotó su cuarta caída consecutiva en febrero. Uno de los sectores que más incidió en ese retroceso, la industria, pide mirar factores clave para su actividad.
La actividad económica cayó un 3,2% interanual en febrero y registró su cuarta caída consecutiva, según informó el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos. En lo que va del año acumula una caída interanual del 3,6%.
La caída registrada en febrero tuvo un recorte respecto de la de enero, cuando anotó una baja del 4% interanual. La variación desestacionalizada respecto del mes anterior fue del -0,2%.
Incluso ya se sabe que en marzo la actividad industrial de las pymes, aceleró su caíday se profundiza la crisis del sector de manera dramática. La brutal suba de tarifas agregada a la continuidad del ancla salarial no hace augurar que el panorama mejore para los que venden sus productos en el mercado interno.
La caída más significativa la sufrió la construcción, con un descenso del 19,1% interanual en el mes. Su incidencia en el nivel general fue del 0,64. Le siguió la intermediación financiera con un recorte del 12,1%.
Qué sucedió con la industria.
En mayo, la incidencia mayor en la caída de la actividad la registró la industria que, a pesar de anotar una baja del 8,4% en febrero y ser el tercer sector más afectado, su incidencia en el nivel general fue de -1,32.
Al respecto de este último dato, desde la Junta Directiva de la Unión Industrial Argentina (UIA) alertaron sobre la “urgente necesidad de implementar políticas que permitan sostener la demanda”.
Sobre la actividad industrial, el último informe del Centro de Estudios de la UIA, en febrero el sector registró una caída del 6,8% interanual y una suba del 0,7% contra enero sin estacionalidad. Es el noveno mes de caída consecutivo. En el primer bimestre, este sector acumula una baja interanual del 8,3%.
Por último, destacaron que los datos preliminares de marzo anticipan un empeoramiento de la tendencia, acompañado por un incremento de los costos y una menor demanda.
El departamento de Estudios Económicos de la Asociación de Industriales Metalúrgicos (ADIMRA) también dio cuenta de un desplome en la actividad metalúrgica para el tercer mes del año. Según puntualizaron, la utilización de la capacidad instalada en esta rama se ubicó en su menor nivel en 8 años, solo superado por los peores cuatro meses de la pandemia. Esto ocurre tras registrar una merma del 17,7% interanual en los niveles de actividad del sector.
Sobre esto último, desde la Junta Directiva agregaron que es necesario considerar el impacto en la industria nacional de la apertura comercial sin antes bajar impuestos, de la suba de las tarifas, para las cuales se esperan subas de hasta 650% y la caída del empleo, que sufrió un recorte del 0,3% en febrero respecto del mes anterior en el sector privado.
Dentro de este contexto, por ejemplo, la entidad que agrupa a las empresas destaca al sector de Minerales no metálicos como uno de los que muestra mayor repliegue. Aquí, sostiene, se dio en marzo una caída interanual de nada menos que del 41,2%.También muestra una baja para el sector Automotriz, con una caída interanual de 29,4%.
La UIA también resalta la desaceleración de la demanda de energía eléctrica de Grandes Usuarios Industriales, que cayó 13% en la medición interanual, tras la baja, aunque más discreta, que había mostrado en febrero.
“En cuanto al intercambio comercial con Brasil, se registró una caída interanual en las importaciones del 27,9% interanual, aunque las exportaciones crecieron un 2,8%”, dice la UIA.
Siempre de acuerdo con las cifras que maneja la entidad, los patentamientos de maquinaria agrícola continuaron su tendencia a la baja y registraron una caída del 84,1% respecto a marzo de 2022.
“No obstante, este decrecimiento encuentra cierta compensación en el repunte del sector agroindustrial, donde se observó un incremento en la liquidación de divisas 22,2% interanual”, afirma el trabajo.
Otro informe, mismas condiciones.
La fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas midió la caída de la industria en 7,1% en febrero y un acumulado del 6,5% en el primer trimestre. En el desglose por sectores, coincide con Adimra en que la metalmecánica es una de las ramas que más cayó, con 16,6%. A los números, que se explicaron por la pérdida de poder adquisitivo frente a la inflación a raíz de la licuación de salarios y jubilaciones, se agrega la preocupación de los empresarios del sector por la apertura de importaciones, que por el momento regula la falta de dólares y la menor demanda.
Los que mejoraron.
Según informó Indec, 7 de los 15 sectores que componen el EMAE registraron subas. La mayor fue la de pesca, que creció un 31,6%, seguido por exploración de minas y canteras (11,6%).
Le siguieron la recuperación de electricidad, gas y agua (7,6%), agricultura, ganadería, caza y silvicultura (5,5%). Enseñanza y servicios de salud subieron ambos 1,8%, mientras que la administración pública lo hizo en un 1%.