Luego de estar reunido por horas con los epidemiólogos de consulta y las autoridades del Ministerio de Salud, informó a los Gobernadores de la decisión y consensuó políticas con ellos. Tras ello, dirigió un mensaje a la Nación donde confirmó que la cuarentena se extenderá hasta el domingo 12 de abril.
El primer mandatario explicó que la extensión del aislamiento social, preventivo y obligatorio hasta que termine Semana Santa era necesario para mitigar los efectos de la pandemia de coronavirus; asimismo, advirtió que “la economía puede levantarse” pero “una vida no”, y se comprometió a que el Estado “va a estar más presente que nunca”.
Luego de haberse reunido por horas con el grupo de expertos epidemiólogos que lo asesora en las medidas seguidas por el país, mantuvo una videoconferencia con los gobernadores y el jefe de Gobierno porteño, para pasar luego a emitir el mensaje desde la Residencia de Olivos, donde pidió a los argentinos “no caer en el falso dilema de la salud o la economía”, pues el país “vive un momento de excepción”.
“Una economía que cae siempre se levanta, pero una vida que termina no la levantamos más”, sostuvo como viene haciendo desde el comienzo de la pandemia el mandatario. Y reafirmó que “…no estamos descuidando la economía, estamos haciendo muchas cosas, no sólo garantizando dinero en los sectores más empobrecidos sino también ayudando a las pymes”.
Flanqueado por el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y el ministro del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro, el Presidente realizó un pedido expreso a los sectores más humildes para que “respeten la cuarentena, porque el riesgo existe allí”, y asimismo para que “cuiden a sus mayores”, que como todos a esta altura saben, constituyen junto a quienes tienen enfermedades precedentes, una de las poblaciones de mayor riesgo en caso de contraer la enfermedad.
Como una manera de diferenciarse de los cuatro años que lo precedieron, marcados por el neoliberalismo, Fernández subrayó que hoy “…todos nos hemos dado cuenta de la importancia del Estado en esta instancia”.
Siguendo esa línea, expresó que “a todos les van a llegar los recursos y alimentos que sean necesarios mientras dure la emergencia”, porque, reafirmó, “el Estado va a estar más presente que nunca”.
“Esto (refiriéndose a lo hecho hasta ahora en Argentina) no lo hizo ningún otro país y estamos experimentando sobre la marcha”, y señaló que “los resultados iniciales son interesantes, buenos, y nos alientan a seguir en este camino”. Y siguió: “Cuando dispusimos el comienzo de la cuarentena obligatoria, nos preguntábamos si los argentinos íbamos a ser capaces de quedarnos en nuestras casas, y tengo que decirles que estoy muy contento”. En ese sentido, se contentó con que “más del 90 por ciento de los argentinos han cumplido con la cuarentena, se han quedado en sus casas y han protegido a sus hijos y adultos mayores, que son los que corren más riesgo entre nosotros”. E inmediatamente, indicó que “el 10 por ciento restante, salió a trabajar, entre “enfermeros, personal de seguridad, los que transportan remedios y los que atienden almacenes, supermercados, farmacias”, señalando luego que “un número muy bajo de gente no cumplió” las restricciones.
“A la que no cumplió le pasó lo que dijimos que les iba a pasar”, dijo refiriéndose a los procesamientos judiciales, una medida justificada en que “nadie ponga en riesgo la salud de la gente”.
Asimismo, hizo hincapié en que apuesta a que a partir de la crisis derivada del coronavirus “la humanidad deje de ser tan miserable y egoísta y vuelque la mirada hacia los que han sido olvidados por el desarrollo”. Para fustigar luego a los empresarios que echaron trabajadores en este momento tan delicado. “Si algo tiene que enseñarnos la pandemia es la regla de solidaridad, porque nadie se salva solo”, sostuvo.
Por JULIO ALBORNOZ para Urbanave