En su viaje a Brasil en la búsqueda de asegurar la provisión de energía que Argentina precisa durante este invierno para no relentizar el crecimiento de la economía, el ministro de Economía, Martín Guzmán, anunció que el país hermano va a garantizar la provisión para Argentina: “Brasil va a garantizar la seguridad energética argentina poniendo a disposición energía eléctrica entre mayo y setiembre”, dijo Guzmán a Télam, a la salida de su encuentro con el ministro de Minas y Energía de Brasil, Bento Albuquerque, en San Pablo. Y agregó que “tiene efecto inmediato en la certeza de nuestra economía”.
Este acuerdo, complementa al alcanzado hace unos días con Bolivia, cuyo presidente en su visita a nuestro país aseguró el cumplimiento de los contratos suscriptos sobre la provisión de gas boliviano a la Argentina, e incluso afirmó que de haber excedentes, nuestro país tendría la prioridad.
Estas medidas alejan el horizonte de restricción y escasez, lo que generaría un cuello de botella al crecimiento industrial de este año, al que el Banco Mundial proyectó en el 3,6% y del que, en ámbitos locales, hasta se espera que resulte en un mejor guarismo. Además, descomprime el problema que generaría el aumento de importaciones de GNL (gas natural licuado) que más que triplican el valor del gas boliviano a raíz del conflicto béelico en Europa, cuyos países además cuentan con la prioridad de su provisión debido a su más holgada billetera, que lleva los precios hacia arriba mientras dure la situación. Tampoco era solución un reeemplazo por gasoil, ya que también duplica los precios con respecto al gas boliviano.